Gummy Bunny es el conejito más travieso del frasco. Su forma adorable engaña… porque dentro lleva un motor potente y una lengua que no se cansa de lamer. Con 12 modos de vibración y 12 ritmos de lamidas, este juguete es perfecto para quienes buscan una experiencia oral intensa sin mover un dedo.
Su textura suave como gomita y su diseño compacto lo hacen tan tierno como peligroso. Prepárate para descubrir lo que pasa cuando el dulce se pone serio.



